
Ayer vi por la primera el concierto de Rosario Flores en el Liceo de Barcelona y, con independencia del estupendo acompañamiento que tuvo con artistas de la talla de Diego el Cigala, Antonio Carmona, la Mari de Chabao, Coti, Paulina Rubio y, cómo no, su hermana Lolita, la verdad es que lo verdaderamente resaltable es la carga de emotividad y ternura que, pese a la fuerza de la raza del linaje de los Flores, tuvieron todas sus interpretaciones.
Sólo quiero dejar nota en este breve post del cariño con que Rosario y Lolita llevan a los escenarios lo mejor de su repertorio tan unido al recuerdo de sus padres y de su hermano Antonio.
Fue un gran concierto. Los amigos de Lolita lo dieron todo. Me llamó la atención el “comomelamaravillariayo” de una estupenda y sorprendente Paulina Rubio que interpretó a dúo con la Flores casi con la misma fuerza que su anfitriona.
Resalto –y cuelgo el enlace- “palabras de amor”, "la distancia" cantada con Coti y un melancólico acordeón, y “no dudaría”, ésta cantada a coro y a modo de colofón de un estupendo concierto cargado de sentimientos y de emociones.
1 comentario:
Me das tanta envidia, Smara...
Porque la vida es así, hace mucho que no puedo disfrutar de mi Madrid cultural, algo que no hace tanto, no perdonaba.
Pero, la paciencia -esa que papá siempre me nombraba- como asignatura global, era algo pendiente en mi vida.
Y, sabe Dios la que me está haciendo tener ahora con todo, todo, todo, todo y más.
Volveré, Madrid, espérame, plis.
Muakiss.
Publicar un comentario