14 abr 2009

MEMORIAS DE OGIGIA (y IV): "Esta es su novia. Fue Fallera Mayor"

Mayo de 2004. Días después de la presentación de mi libro "Breve Historia de Valencia" en el Hotel Astoria, el Grup organizó una segunda puesta en escena en su sede central de la calle Pintor Gisbert de Valencia.

El salón estaba practicamente lleno y alguno de los presentes ya había asistido al primer acto que fue conducido por mi amigo B. Bueno, quien me prologa este libro, y por Fernando S. Dragó que intervino como mantenedor de la velada.

Esta nueva presentación era mucho más familiar y, además, en casa porque la sede del Grup es, sin lugar a dudas, la sede y hogar del valencianismo.

Breve Historia de Valencia es, como reza su portada, una didáctica elemental para amar y defender a Valencia, intentando desmontar todos y cada uno de los mitos y mentiras que se han ido creando en torno a nuestra identidad, lengua y cultura.

Al finalizar el acto, como es costumbre, los asistentes me preguntaron sobre algunas cuestiones que, por entonces, protagonizó la Fundacio N. V., embrión del nuevo partido que acabábamos de fundar, C.V. Estábamos en plena campaña de recogida de firmas contra el decreto del gobierno de "zetape" que acababa de aprobar la denominada "fórmula Moratinos" que unificaba lingüística y denomiativamente al idioma valenciano con el catalán en el ámbito de las instituciones europeas. Concretamente el Consejo de Ministros de la Unión Europea se reuniría el 17 de junio de ese año 2004 para aprobar la carta o memorandum de lenguas regionales o minoritarias que sustituiría el, hasta entonces vigente, "Informe Killilea" aprobado el 28 de febrero de 1994 que, este sí, reconocía la singularidad y sustantividad de la lengua valenciana frente al catalán.

Los asistentes al acto tuvieron especial interés en que les contara, también, un reciente incidente que tuve con el secretario general de Esquerra Republicana de Cataluña, Jose Luis Carod, Rovira, al que sorprendí en la cafetería del Hotel Astoria de Valencia y le dije de todo menos guapo hasta que se lo llevaron en volandas dos guardaespaldas que lo introdujeron en el vehículo oficial, con tal celo, que le golpearon un sonoro coscorrón que hizo las delicias de los que estábamos presentes.

Llegado el momento de la firma de "Breve Historia de Valencia", la directiva del Grup había dispuesto una pequeña mesa en una esquina del local, bajo del escenario, junto a un amenazante montón de libros que me anunciaba que iba a hacer un buen ejercicio de muñeca.

Tras una larga cola de gente a la que me encuentro entrañablemente unido porque ya son muchos años los que compartimos defendiendo nuestra personalidad y legalidad autonómica y constitucional contra los lestrígones nacionalistas catalanes, firmé un ejemplar a una persona de avanzada edad que no conocía y que, de inmediato, me presentó a su nuera y a su hijo: "Se llama Elena. Es la novia de mi hijo Nacho. Fue Fallera Mayor de Valencia". Les di la enhorabuena a todos y les dediqué los libros. Él me pidió que le firmara la dedicatoria en castellano y así lo hice.

He de reconocer que cuando estaba formándose la cola me fijé en Elena. Además de tener un buen tipo era una guapa rubia, alta y con un porte elegante. Fue en ese momento cuando nos cruzamos una mirada directa, muy directa. Con el tiempo ella me contó que, también entonces, se fijó que llevaba una alianza en mi mano izquierda, lo cual, con independencia del halago, me sorprendió el tiempo que ella llevaría desconectada del ambiente y lucha valencianista y del Grup al que ya sus padres la llevaban siendo una niña. Lo digo porque era ya mi cuarto libro y yo era miembro de la entidad desde 1985 y presidente desde 1994 hasta el 2002 y allí todos sabían que yo estaba casado. Ella tenía 30 años y yo 44.

Pues en efecto, pese a todo y a que yo llevara la alianza, ese fue nuestro primer día. El primero de mi destierro en Oggigia, la isla de mi pecado que acabaría, cuatro años después, en junio de 2008, con mis huesos en un calabozo, arrojado a la vergüenza pública y con todos nuestros proyectos, políticos y personales, hechos trizas por culpa de mi atormentado corazón y de la mentira e infamia del suyo despechado.

Próximo capítulo: Mayo 2004 a Junio de 2006: "Las chinchetas de una relación de cuatro".

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