28 ene 2009

Navajas en el PP

La bronca que existe en el PP en vísperas de las elecciones al Parlamento Europeo, autonómicas vascas y gallegas, les va a pasar una seria factura.

Los populares escenificaron este fin de semana una inexistente unidad interna intentando transmitir a la parroquia una cohesión orgánica que para nada es cierta.

Hoy he escuchado a Esperanza Aguirre acusar sin disimulo ni prudencia política alguna el navajeo cabritero que se practican entre si las dos facciones que se disputan la herencia de Rajoy.

Rajoy está muerto. Muerto de solemnidad. Y a lo que estamos asistiendo no es a otra cosa que una pugna desenfrenada y cruenta por el control de la nomenclatura del partido con sede en no se sabe dónde.

El viaje que les va a pegar el PSOE, pese a la crisis, los va a tener tambaleándose lo que queda de legislatura y la que viene. Tanto si le sucede Gallardón como la Aguirre. Mientras, Rosa Diez irá recogiendo los despechados de la familia que pierda el pulso.

El partido de Rosa Diez, lleno de socialistas y miembros de la Unificación Comunista de España y con un más que comprometido voto de una parte de la extrema derecha, está llamado a ser un nuevo continente multirracial en el que, en su momento, acabarán también a tortas.

Así, nos encontraremos a las puertas de las generales del 2012 con un PSOE que, lejos de pagar la cara factura de esta crisis, gozará de buena salud gracias a las dolencias de la oposición.

Mientras, el PP tendrá que haber dilucidado si quiere erosionar al PSOE por el centro izquierda de la mano de Gallardón o volver al centroderecha de Esperanza Aguirre.

Ambos se las verán en unas primarias o congreso extraordinario y ganará quien controle la estructura: la elección de compromisarios. Hoy por hoy quien tiene esas riendas es Rajoy, o sea, Gallardón.

smarah@hotmail.es

1 comentario:

Berenice dijo...

Escribes que te passass, pitufo.
Pero, un apunte: menos política y más amoOoor...

(es que me tienes mal acostumbrada, gordito, con mis inyecciones diarias de posts)

Besito.