-No a la profesionalización de la política

Me imagino la cara que se les habrá quedado a los 700 mil militantes que tiene el PP en toda España cuando se hayan enterado de que el tesorero del partido cobra 50 millones de pesetas de sueldo anual, además de otros ingresos.

Me imagino la cara de gilipollas que se les habrá quedado a los políticos y cargos del PP que en su vida pensaron en ganar honradamente esa cantidad de dinero.

Y me imagino la cara de idiotas de todos ellos juntos de ver que en Génova nadie mueve un dedo ni se da una explicación ante esta clara muestra de profesionalización de la política cuando la gente del PP se parte el pecho por la organización mientras sus dirigentes cobran ingentes cantidades de dinero, reciben regalos más o menos miserables -pero todos ellos indignos-, se suben en Jaguars o aceptan maletines inmobiliarios.